El concepto de “Casa” está cambiando a pasos agigantados. La cocina, que en TOMATO siempre hemos considerado el corazón del hogar, es un lugar cada vez más importante, con espacios diáfanos, integrados y donde poder disfrutar cocinando en familia o con amigos.
Cocinas simples, funcionales e integradas al salón
En 2023 continuaremos viendo cocinas integradas al salón, para compartir tiempo en familia y recibir a amigos. Ganan presencia materiales naturales como la piedra o la madera. El “Japandi”, mezcla de japonés y escandinavo, es clave para la nueva temporada e inspira cocinas con armarios imperceptibles para que nada esté a la vista y donde predomine el orden. Armarios de cocina con texturas naturales o acanaladas, con frentes de estilo orgánico y texturas que evocan a la naturaleza.
Otra idea presente son los materiales y producción ECO, el mobiliario 100% sostenible y los materiales proveniente de bosques sostenibles y certificados. También es importante la utilización de barnices libres de tóxicos o los aceites naturales.
Las piezas sanitarias y sus nuevos diseños ganan protagonismo
Otro ejemplo de esos cambios lo podemos ver en los cuartos de baño, que se unen a la habitación principal, para convertirlos en una suerte de refugio para el disfrute y el descanso. En cuanto a los materiales, triunfa la madera y la piedra natural, que conectan la casa (y a sus habitantes) con la naturaleza y su entorno. Cada vez más, y gracias a nuevos diseños, los sanitarios forman parte del mobiliario de la casa: bañeras, griferías, inodoros. Sobre los colores, las paletas pasteles en tonos tierra son la base perfecta sobre la que añadir azules, verdes y rosas.
En el salón veremos sofás más amplios y orgánicos
En 2023, veremos muchos sillones curvos, papeles de pared pintados con temas florales o de hojas. Además, se nota un movimiento hacia la comodidad y amplitud en los sofás, con formas más curvas y rellenos mullidos para favorecer la comodidad. Otro elemento importante es la mezcla de texturas y materiales para enriquecer el espacio, terrazo, terciopelo, otomanas y mesas laterales, lámparas, objetos de cobre, cerámica hecha a mano, además de floreros coloreados y de madera.
Jardines funcionales para disfrutar del exterior
Por último, los jardines pasan de ser espacios meramente estéticos y se transforman en áreas funcionales en las que disfrutar del exterior, integrando cocinas, salones, cenadores o huertos. Otro de los puntos a tener en cuenta continuará la protección del medio ambiente, apostando por especies autóctonas adaptadas a nuestro clima y que potencien en la medida de lo posible la biodiversidad en nuestras ciudades. Por supuesto, parte de esta sostenibilidad incluye espacios de fácil mantenimiento, que funcionen prácticamente solos; micro-sistemas que nos ayuden a disfrutar del exterior con un mínimo esfuerzo